¿Qué es susurrar? La acción de susurrar es una irrupción poética que invita a detenerse, un instante, para disfrutar de la belleza de las palabras. A través del susurro se crea una comunicación íntima y personal, entre dos personas, que se transmiten poesía.
¿Qué se necesita? Un tubo de cartón, dos personas y un poema. Los susurradores son tubos de cartón que sirven para transmitir poesías o textos que se recitan al oído.
Cómo nos diceNatalia Blanc en su nota editorial“El efecto es mágico: el poder de la poesía se potencia en ese acto de intimidad que implica la acción de susurrar.”
¿Cómo se originó la idea de sussurrar poesías?
Los susurradores surgieron en Francia en 2001. Les Souffleurs, que así se llamaron, eran unos personajes vestidos de negro, con paraguas y largas cerbatanas, que proponían a los peatones de camino al trabajo susurrarles poemas al oído.
Partiendo del principio de que la humanidad se reproduce de boca en boca y que el hombre es una suma de virtualidad de puntos de vista (Deleuze), Olivier Comte escribió un “Manifeste du Chuchotement” y creó en enero de 2001 un grupo de intervención poética que llama: El Comando Poético Sopladores
Les Souffleurs proponen una metáfora poética del flujo de información anónima susurrando al oído de los hombres con la ayuda de cañas huecas (los ruiseñores) secretos poéticos, filosóficos y literarios y oponer así a la incertidumbre general del relato la provocativa postura de la ternura.
Mirta Colangelo“de Fluisterende Mage”introdujo y difundió esta idea en la Argentina. Con sus palabras en una entrevista publicada en el EDELIJ-SECTIEdefinía la sensible experiencia de susurrar:
“A través del susurro, en esa ceremonia íntima personal que sucede ente dos personas lo que se trasmite es poesía. Inasible, indefinible, la poesía es sin dudas un modo de conocimiento que elige o permite una manera de aproximación oblicua hacia lo que convenimos en llamar mundo. Se opone a las demostraciones, desconfía del razonamiento; las explicaciones que se dan no la manifiestan, sorprende, trastoca, provoca, seduce, enamora. En la poesía las palabras se iluminan, destellan, llaman… La poesía busca el revés de las cosas, lo oculto, la ambivalencia. Está emparentada con lo abierto, con la posibilidad.”
NO HAY SUSURRADORES SIN POEMAS